La inteligencia de riesgos, más tradicionalmente denominada gestión de riesgos, puede interpretarse de muchas maneras diferentes, desde la recogida, el tratamiento, la integración, el análisis y la evaluación de la información disponible sobre la naturaleza del riesgo. Sin embargo, un concepto erróneo es pensar que son la misma cosa. Por definición, la Inteligencia de Riesgos difiere bastante de la gestión de riesgos en que permite obtener información procesable, mientras que la gestión de riesgos consiste en utilizar herramientas para identificar y mitigar los factores de riesgo.
Aun así, ¿no son más o menos lo mismo?
Pero aquí es donde me gustaría arriesgarme y argumentar que la Inteligencia de Riesgos es cada vez más vital para que las marcas la adopten en 2023. Hoy en día, con las crecientes perplejidades y condiciones que suceden en torno a su panorama empresarial, el reto nunca ha sido más primordial para que las marcas entiendan lo que está sucediendo, por no hablar de los problemas que van a suceder.
La posible analogía que podemos hacer es la siguiente. Imaginemos que estamos en una estación de tren y que corremos contrarreloj para coger el tren que nos lleva a nuestro destino. Hay dos trenes a los que puedes subir. Sin embargo, es posible que antes de subir no sepas que uno de los trenes va a sufrir pronto un posible retraso en su recorrido varias estaciones más adelante. Ahora, con la información correcta a mano, ¿habrías tomado medidas proactivas para evitar el tren equivocado?
Eso es la inteligencia de riesgos, en pocas palabras, aprovechar la información consolidada para actuar sobre los riesgos actuales y emergentes de la empresa.
Pero si lo que buscas es una definición completa de inteligencia de riesgos, Exiger, consultora global de riesgos, describe la inteligencia de riesgos como la "solución que ayuda a las empresas a identificar y evitar o gestionar regularmente el impacto y la duración de los incidentes de riesgo de las partes interesadas".
Además, la inteligencia de riesgos es un proceso continuo y validado de contabilización de "peligros potenciales de todos los sectores industriales, desde riesgos cibernéticos a riesgos financieros, fallos en la cadena de suministro, fenómenos meteorológicos extremos o insatisfacción del cliente".
Dicho esto, la inteligencia de riesgos es fundamental si necesitas vigilar las amenazas macro y micro que se avecinan en tu entorno, ya que estos factores de riesgo pueden ser muy perjudiciales para tus prioridades empresariales a largo plazo. Captar ahora la información necesaria para actuar en consecuencia marcará la diferencia entre una estrategia proactiva y preparada para afrontar los retos y una estrategia reactiva que responda a las crisis en función de las necesidades.
Aunque ser reactivo no es malo, tiene sus desventajas frente a un enfoque proactivo. La evolución actual del panorama empresarial exige que las empresas operen de forma dinámica, como se ha observado tras el COVID-19, el actual conflicto entre Rusia y Ucrania y la adopción de aplicaciones de IA.
No hace falta decir que ser predominantemente reactivo en tu estrategia significa esperar a que un riesgo ya se haya materializado antes de abordarlo. Este nivel de reactividad puede considerarse perturbador, sobre todo porque las crisis inesperadas podrían amenazar las operaciones empresariales, la estabilidad financiera y la imagen de marca. Asumir riesgos con este planteamiento supondría compromisos significativos y costosos que si hubieras tomado medidas antes para prevenir o mitigar el riesgo.
Por el contrario, un enfoque proactivo de la inteligencia de riesgos implica anticiparse a los riesgos potenciales y tomar medidas para prevenir o minimizar su impacto antes de que se produzcan. Este enfoque permite a las organizaciones identificar los riesgos potenciales y ser conscientes de los pasos necesarios para abordarlos antes de que se conviertan en problemas importantes en el futuro.
¿No es más fácil asignar los recursos con antelación, como dar prioridad a la I+D en el siguiente trimestre para apoyar la innovación y cerrar las brechas tecnológicas frente a los nuevos actores o empezar a auditar antes en respuesta a un escándalo que afecte a todo el sector?
Como demuestra la rapidez con la que se corre la voz en las redes sociales, pueden pasar minutos antes de que la gente empiece a agrupar su marca con una mala reputación.
Adquirir una sólida inteligencia de riesgos proporciona a las marcas la resistencia necesaria para sortear los obstáculos del mercado de forma fiable sin comprometer sus objetivos operativos.
Leo Tilman lo dijo mejor que nadie: "la inteligencia de riesgos es la piedra angular de la agilidad organizativa y la mejora del rendimiento". Para garantizar la longevidad de las operaciones de su empresa, es imprescindible adoptar una estrategia proactiva de inteligencia de riesgos que identifique y mitigue los riesgos potenciales antes de que puedan causar daños.
¿Cómo deben tener en cuenta las marcas la inteligencia de riesgos en su estrategia y planificación? La inteligencia de riesgos consiste en asumir los riesgos identificados y crear contingencias para mitigarlos. Las marcas que no tienen en cuenta la inteligencia de riesgos se exponen a daños en su reputación, pérdidas financieras, problemas legales y otras consecuencias negativas.
Para incorporar la inteligencia de riesgos, las marcas deben realizar primero una evaluación de riesgos para identificar los riesgos potenciales y su probabilidad de ocurrencia. Esto puede implicar:
Un aspecto importante de la inteligencia de riesgos es el seguimiento y la actualización de los riesgos y tendencias emergentes. Dado que los medios de comunicación abarcan un amplio espectro que va desde las fuentes tradicionales a las digitales y en línea, es esencial comprender de dónde procede su audiencia. De este modo, puede limitar los canales para vigilar las posibles amenazas, desde las quejas sobre la marca hasta los malos comentarios de los principales líderes de opinión de su sector.
Las marcas deben revisar periódicamente sus herramientas de evaluación y gestión de riesgos para asegurarse de que están actualizadas y son eficaces a la hora de abordar los riesgos nuevos y en evolución, posicionándose sin preocuparse por las interrupciones.
✈️ Singapore Airlines:
Singapore Airlines es conocida por sus elevados niveles de seguridad y su excelente servicio al cliente, resultado de su inversión en inteligencia de riesgos. La compañía ha implantado sólidos protocolos de seguridad y planes de respuesta a emergencias para garantizar la seguridad de sus pasajeros y tripulación. Supervisa y analiza periódicamente los riesgos potenciales para sus operaciones.
🚕 Grab:
Grab es una plataforma de transporte y reparto de comida que opera en el Sudeste Asiático. La empresa ha invertido en inteligencia de riesgos para identificar y mitigar posibles riesgos para sus operaciones, como amenazas a la ciberseguridad e interrupciones de la cadena de suministro. Por ejemplo, durante la pandemia de COVID-19, Grab aplicó medidas de mitigación de riesgos como la entrega sin contacto y protocolos de seguridad para sus conductores y clientes.
🚚 DHL:
DHL es una empresa de logística que opera en el Sudeste Asiático y otras regiones. La empresa ha invertido en inteligencia de riesgos para identificar y mitigar posibles riesgos para sus operaciones, como interrupciones en la cadena de suministro y retrasos en el transporte. Por ejemplo, DHL ha puesto en marcha planes de contingencia y rutas de transporte alternativas para garantizar la entrega puntual de mercancías, incluso durante catástrofes naturales u otras interrupciones.
No se puede prever lo que ocurrirá dentro de un año. Sin embargo, lo que las marcas pueden hacer ahora es tomar medidas activas para afrontar los retos del panorama empresarial actual, en lo que respecta a sus perspectivas económicas, tecnológicas y operativas, entre otras.
Ahora que ya estás preparado para reflexionar sobre cómo se supone que funciona la inteligencia de riesgos, te sorprenderá saber que existen múltiples tipos de herramientas de inteligencia de riesgos disponibles en línea, en función de la escala y los tipos de riesgo sobre los que necesites información.
Sea cual sea la solución por la que se decida, preste atención a formular una política estándar y reunir un equipo para combatir cualquier percance tecnológico, asegurándose de que su modelo de inteligencia de riesgos funciona para cortar las amenazas de raíz durante todo el año.
Las redes sociales son un tesoro de información, con millones de conversaciones cada segundo. Recopilar información sobre riesgos y mercados en las redes sociales es crucial para proteger la reputación de tu marca frente a detractores y críticas sociales cuando menos te lo esperas.
Las marcas pueden utilizar la supervisión de las redes sociales para obtener información sobre riesgos mediante el análisis de las conversaciones en línea, la identificación de posibles amenazas y riesgos para la reputación, y el desarrollo de estrategias para mitigar esos riesgos, lo que en última instancia ayuda a proteger la reputación de su marca y a mejorar su enfoque general de gestión de riesgos.