Los juegos olímpicos siempre dan de que hablar, pero quizás nunca antes lo hayan hecho por motivos tan diversos. Desde las dudas sobre si las medidas de seguridad adoptadas son suficientes frente a la pandemia mundial en la que seguimos inmersos, la elección de deportes inusuales como el skate o el futbol, el debate sobre el diseño de las equipaciones y la salud mental son temas que están en las redes. En este artículo hemos recogido un top 5 de temas de conversación que están en la boca de todos cuando hablamos de las olimpiadas Tokio 2020.
Las polémicas sobre si los juegos olímpicos debían celebrarse, ha sido un tema recurrente en las redes desde que comenzó la pandemia. Un año más tarde de lo programado, los juegos 2020 finalmente tomaron forma, pero no por ello la gente se mostró menos preocupada. Y no sin motivo.
El pasado martes, las autoridades de Tokio anunciaron 2.848 nuevos casos positivos de Covid-19, una cifra que supera el récord de contagios para Tokio desde el inicio de la pandemia. Muchas marcas ya decidieron no patrocinar ni anunciarse durante estos juegos, ya que temían que esto repercutiese en su imagen de marca. A la hora de la verdad, cada marca tiene que evaluar y juzgar si le sale a cuenta patrocinar y tener cuidado en que no se malinterprete el mensaje que quiere mandar con ello. En este aspecto, es interesante analizar esta polémica por territorios.
La imagen de arriba muestra las conversaciones que se han dado en los últimos 3 meses, en torno a los Juegos Olímpicos con relación al Covid-19 y la preocupación por el posible aumento de contagios. México fue el país que se mostró más preocupado con un 15% de las conversaciones totales en la capital. Le siguen Tokio con un 7%, Madrid con un 6%, Caracas y Buenos Aires ambas con un 5%, y Bogotá y Lima con un 4%.
Claramente, Brasil no está pasando desapercibido estos juegos olímpicos, pero ¿de qué hablan los internautas de este país? Tres personas destacan en esta búsqueda: Rayssa Leal, Italo Ferreira y Rebeca Andrade. Las redes sociales se han llenado de halagos hacía los medallistas, pero lo interesante del hilo de conversación que se generó es ver dónde se puso el foco de las conversaciones.
Rayssa ya se puso bajo el radar hace unos años, cuando un vídeo de ella vestida de hada y con tan sólo 7 años se hizo viral en las redes. Hace unos días, la ya adolescente de 13 años se hacía con la plata en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020. En esa misma línea, el foco no estaba en la medalla en sí misma, sino en la juventud de Rayssa y en el hecho de ser una chica en un deporte en el que predominan chicos. Frases como “la medallista olímpica más joven de Brasil” o “la joven promesa del skate brasileño” han plagado Internet. Además, muchas personas hablaban de lo importante que es para en el mundo del deporte femenino visibilizar que “el hada del skate” haya ganado una medalla olímpica.
Italo Ferreira, por su parte, se hacía con el oro en la categoría de surf, frente al japonés Kanoa Igarashi y el australiano Owen Wright, quienes ganaron la medalla de plata y bronce respectivamente. Y en este caso, el foco de la conversación sí se centró en la medalla, ya que es la primera vez que Brasil gana un oro en este deporte. En el caso de Rebeca Andrade, las conversaciones se han centrado en su medalla, pero también en los inicios humildes de la deportista. La palabra “crianca” aparece ligada a su nombre en varias ocasiones.
Esa es la pregunta que todo el mundo se está haciendo. Ahmed, el joven tunecino de 18 años, estaba en la calle 8 de la piscina en la prueba de natación 400 metros libres cuando se hizo con el oro. Completamente inesperado: así fue su triunfo. Ahmed no sólo no era el favorito, sino que ni siquiera estaba en el radar. Así lo demuestran las conversaciones en Internet: en español, no existía ningún tipo de mención al nadador antes del 25 de julio.
Tras ganar el oro, las menciones subieron a más de 4.000 en tan solo un día, teniendo en cuenta solo las conversaciones en castellano, lo cual nos muestra lo poco conocido que era el deportista antes de esta hazaña. Las búsquedas sobre el joven Tunecino se dispararon y los medios de comunicación comenzaron a dar respuesta a la principal pregunta que todo el mundo se estaba haciendo: “¿Quién es Almed Hafnaoui?”
Cuando la gimnasta Simone Billes se retiró de las pruebas de grupo, Internet se llenó de especulaciones sobre los motivos por los cuales había tomado esa decisión. Sin embargo, cuando la propia gimnasta explico que lo había hecho por salud mental, la oleada de conversaciones se tornó en apoyo a la gimnasta olímpica.
Pero vamos a ver un ejemplo. Hemos tomamos la palabra clave “Simone Billes” y hemos analizado solamente las conversaciones en castellano. Para comprender mejor el impacto que ha tenido la declaración de Billes, vamos a comparar el volumen de conversaciones antes y después de la declaración. Una semana antes se registraban unas 44 menciones con un alcance estimado de 162 mil personas. Una semana después, las menciones se dispararon a 334 con un alcance de 3 millones de personas.
Además del gran aumento en el volumen de menciones, en este caso, lo interesante es ver cómo cambió el hilo de conversación. No solo cambió el foco de las conversaciones en torno a la gimnasta, sino que logró que se dejase de hablar tanto del estado físico de los atletas y se comenzase a hablar de estado psicológico de los mismos. Dio visibilidad a la presión a la que están sometidos los deportistas olímpicos, independientemente de cualquiera que sea su disciplina. Fue a raíz de este suceso por lo que otros deportistas también han empezado a hacer declaraciones sobre la presión a la que están sometidos y los medios de comunicación han empezado a sacar noticias sobre ello. Un ejemplo de esto es como se ha comentado en varios medios online que Tom Daley, el nadador británico, hace crochet para liberar estrés.
Uno de los primeros temas que causo polémica en las redes sociales, fue la sanción que recibió el equipo femenino noruego de balonmano playa por negarse a usar la parte baja del biquini y vestir, en su lugar, una mallas. La multa, la cual ascendía a US$ 1.764 dólares, sin duda les ha costado mucho más cara a la Federación Noruega de Balonmano y a la Federación Europea de Balonmano, quienes se han ganado la antipatía de los internautas.
La noticia tuvo tal alcance y creó tal revuelo que llegó a oídos de famosos de otras disciplinas, como la cantante Pink, quién se ofreció a pagar la multa del equipo noruego de balonmano y animaba a que se denunciasen este tipo de injusticias sexistas.
Las redes se han volcado a denunciar esta situación, independientemente de la profesión que practiquen o el país que tengan de origen. Pero, ¿qué hay en cuanto al sexo? ¿Preocupa igual a hombre y mujeres, jóvenes y adultos? Una mirada a la demografía de estas conversaciones en redes sociales da respuesta a estas preguntas.
Al tratarse de un tema de desigualdad y discriminación por sexo, era de esperar que haya más mujeres hablando de este noticia. Sin embargo, los hombres no se han desentendido de este problema, lo cual ha dado como resultado una demografía muy equiparada en cuanto al porcentaje de personas que estaban hablando de la noticia: un 54% eran mujeres y un 46% hombres. En cuanto al rango por edades, hay una predominancia entre los adultos de 26 a 40 años. Un 50% de las mujeres que se han sumado a hablar en redes sociales de esta polémica son millennials y un 71% en el caso de los hombres. Como segundo grupo de peso, un 35% de las mujeres son de la generación Z y un 18% de los hombres pertenecen a generación X.